por lo que sigo aquí

Tienes mi vida entera contigo
¿Será por eso?
Tienes los ojos que me dicen siempre la verdad
Pero no sé si por eso
Tu espalda dorada, brillante,
como si llevaras una armadura
De la que nadie sabe nada
O por tus pies que pisan pero vuelan
Por tus manos calientes
Por saberlo todo y no gritarlo
Por hablar en mi oído en la noche
Aunque eso sólo esté en mi imaginación