Ley de Godwin


a raíz del post anterior y del comentario de Art. al mismo, he conocido la Ley de Godwin. En Wikipedia se encuentra su enunciado, "A medida que una discusión online se alarga, la probabilidad de que aparezca una comparación en la que se mencione a Hitler o a los nazis, tiende a uno".


A lo largo de estos días hemos oído a varios periodistas y políticos hablar del nazismo para sustentar sus críticas a la ley anti-tabaco. Además de las frases gloriosas del post anterior, hemos leído en Twitter a Arturo Pérez-Reverte fabular con que "Ana Frank fumaba, la delató un vecino cuando bajó a fumar al bar", o al inefable Javier León de la Riva, parafraseando a Niemöller, "Primero vinieron a buscar a los comunistas, y yo no hablé porque no era comunista. Después vinieron por los judíos, y yo no hablé porque no era judío. Después vinieron por mí, y para ese momento ya no quedaba nadie que pudiera hablar por mí". "Aquí empezamos por denunciar a los fumadores".

Es habitual que a lo largo de una conversación cualquiera de nosotros evoque a Hitler o Goebbels como el máximo exponente de la maldad humana. Supongo que Jesús, Teresa de Calcuta o Vicente Ferrer son el extremo contrario, pero no impactan tanto en la argumentación. Es lamentable, no obstante, que los columnistas y los políticos, que al fin y al cabo son profesionales de la argumentación, sean tan simples que necesiten recurrir a Hitler para apoyar sus opiniones.

Menos mal que tenemos a la blogosfera para leer opioniones frescas e imaginativas. Los blogueros somos quizá más amateurs, pero también más auténticos.