El té verde se usa desde hace unos 4000 años en la medicina china por ser rico en antioxidantes (flavonoides y vitamina C) y por sus beneficios para la salud: refuerza el sistema inmunitario, previene el envejecimiento precoz, evita los accidentes cerebro vasculares (ACV) y combate la gripe, la constipación y algunos tipos de cáncer. También se ha demostrado que mejora la densidad ósea , y reduce la apnea obstructiva del sueño, una condición médica que impide tener una buena noche de descanso, lo que perjudica la capacidad de cognición.
El té verde ayuda a perder peso
El té verde ejerce un efecto termogénico en el organismo, es decir, ayuda a gastar más energía estimulando el metabolismo, lo que lleva a la pérdida de peso, siempre y cuando se tengan algunos cuidados con la alimentación, claro está.
Confirmación científica
Los resultados de un estudio publicado en 2010 en el Europen Journal of Clinical Nutrition.
relacionan una dosis reducida de galato epigalocatequina (EGCG) de té verde con un incremento del 33% de la oxidación de grasas. “Este estudio revela, por primera vez, pruebas de que una catequina del té verde, la EGCG, puede aumentar la oxidación lipídica en hombres obesos hasta 2 horas después de haber consumido alimentos. Dentro de esta fase posprandial, la EGCG es equivalente a la cafeína en lo que respecta a la oxidación lipídica”, explicaron los investigadores.
Otro estudio, mostró que el consumo de té verde favorece la redistribución de las grasas corporales reduciendo la que se concentra en la barriga: el tejido adiposo subcutáneo,
La acumulación de grasa en el abdomen aumenta el riesgo de desarrollar hipertensión, dislipidemia, resistencia a la insulina e intolerancia a la glucosa. Juntos, estos síntomas constituyen el síndrome metabólico, que, según la comunidad científica y médica, favorece la aparición de enfermedades cardiovasculares, asma y algunos tipos de cáncer.
Este estudio enaltece la importancia del té verde en la reducción de la grasa abdominal. Existen más estudios que corroboran la tesis de que el té verde ayuda a adelgazar.
Cuidados y recomendaciones
Debido a su índice de teína (un estimulante similar a la cafeína), las personas que padecen hipertensión arterial deben consumir el té verde con moderación, ya que un consumo excesivo podría favorecer el aumento de la tensión arterial. También deberán tener cuidado aquellos que sufren gastritis, úlceras gástricas o reflujo gastroesofágico. En estos casos, pueden tomar té verde desteinado, es decir, que se le ha retirado la teína.
Para que no pierda sus propiedades beneficiosas, no se debe hervir el té verde. Lo que hay que hacer es introducir una bolsita de té en una taza con agua hirviendo y dejarla reposar durante 5 minutos. Se puede beber caliente o frío, pero mejor sin endulzantes o, en todo caso, con un poco de miel o de fructosa.
Además, se puede combinar con menta, ginkgo biloba, limón o ginseng, que potencian sus efectos..