Jane Godall, actvista
Jane Goodall nació el 3 de abril de 1934 en Londres en el seno de una familia de clase media, criándose en la posguerra en la casa familiar de Bournemouth, en el sur de Inglaterra. Allí vivió su infancia y juventud, rodeada de animales y soñando con escribir sobre los animales en África. A los 23 años comenzó a hacer realidad su sueño viajando a Kenia, donde trabajó con el famoso antropólogo Louis Leakey, hasta que éste la envió en 1960 a Gombe, Tanzania, con la arriesgada misión de investigar por primera vez a los chimpancés salvajes de la zona. Con la sola compañía de su madre y un cocinero, plantó su tienda en la selva y comenzó su proyecto de investigación que duraría en teoría 6 meses, y que se prolonga ya por más de medio siglo. Lee más
La principal causa de deforestación en América Latina: la ganadería
La deforestación pese a lo que crea el común de la gente no es para hacer leña, construir casas, hacer muebles, estás actividades normalmente demandan poca madera y esta se produce de forma sostenible, respetando la fuente renovable. Continúa leyendo
Renovables
500MW - tecnología Bright Source Energy |
250MW tecnología Abengoa Solar |
1101KW - Endesa |
nueva tasa en la sierra
La última, y relacionada con Collado Hermoso, es la nueva tasa por coger setas. Ya desde el año pasado veníamos oyendo que en algunas zonas de la provincia había que pagar para recolectar níscalos o boletus, y estos últimos fines de semana en los bares de la zona se comentaba que la tasa ya nos afectaba a los collalbos. Parecían sólo rumores pues las administraciones públicas no han dicho ni pío.
Macrolepiota o parasol |
Buscando cuáles son las zonas afectadas, cuánto se paga, dónde, etc ... he encontrado un enlace en la web de la Diputación de Segovia que da algunas pistas, aunque no me he enterado muy bien si debo pagar algo o no y cuánto.
Boletus |
Ahí va lo que he deducido:
- Collado y La Salceda no están incluidos, pero la parte alta del monte pertenece también a Torreval y Navafría, que sí están incluidos en la tasa, así que cuidadín y a comprar un GPS para saber dónde estás cogiendo setas.
- Si alguien es residente en uno de los munipios afectados pagará de 3 a 5€ por temporada. Si no eres del municipio, 400€ al año.
- No veo nada de límite de kilos, lo cual no me parece ni medio bien si lo que se persigue es limitar la presión recolectora.
Con todo, intentaré hablar con algún guardia a ver qué cuenta. A ver si aún me tengo que alegrar de que este año no hayan salido setas. Para mí que se han acojonado pensando que también les van a cobrar a ellas.
Níscalo |
Reciclaje
Bien, pues parece que las administraciones locales entienden algo distinto, y cuando nos bombardean con la susodicha palabra, parecen referirse a acumular, recoger y transportar materiales sin importarles mucho el resultado final. En este proceso de "separación" previo al reciclaje, los ciudadanos se toman la molestia de tener unas cuantas bolsas de basura en casa y transportarlas al punto limpio. Después, tenemos que confiar en que el ayuntamiento de turno entrega los residuos a plantas adecuadas para generar un material nuevo.
Acerca de este punto, el que escribe ha oído rumores de fraude por parte de las contratas de basura, y mis sospechas aumentaron el día que el vigilante del punto limpio de Alcobendas me recriminó por hacer unas fotos al recinto. No me dio explicaciones al respecto. Últimamente, tras leer algunas noticias, veo que ser un fan del reciclaje es un acto de fe.
En fin, sí al reciclaje y no a las milongas. Dibujitos como el de abajo están bien, pero si nos dan cifras y vemos resultados, pues mucho mejor.
La mayoría de la gente nos hemos creído que reciclar es bueno, pero queremos ver un beneficio tangible. No digo ya que nos paguen por reciclar (lo habitual en algunos países) pero sí que al menos nos informen del resultado de nuestro esfuerzo. Y por supuesto, si este esfuerzo revierte en beneficio para el municipio donde vivimos, que se note en una reducción de impuestos y no en un incremento.
Por comparar, al menos en España vamos algo más avanzados que en Inglaterra.
Londres, aparte de ser bastante cochina, carece de un número aceptable de papeleras lo cual incrementa el número de barrenderos necesarios para recoger tanta lata de refrescos y envase de comida. Los barrenderos echan todo al mismo cubo, al igual que el común de los mortales pues, al menos donde vivo, no hay recogida selectiva de basuras (ni papel, ni plásticos, ni vidrio). Lo que no sé es si luego separan algo en el vertedero.
yo no, la verdad.
Durante un tiempo pensé que yo era ecologista, al menos los síntomas lo decían: socio de ADENA desde pequeño, incontables árboles plantados, subir montañas como actividad favorita , defensor del transporte público ..., pero a la vez otras de las cosas que hago contrarían esta percepción. A saber, llevo un coche bastante pesado, uso el avión con frecuencia, me gusta más la carne que la lechuga, ...
¿Qué soy pues, ecologista, urbanita, pasota, inconsecuente? A veces, hasta he llegado a tener remordimientos por mi modo de vida insuficientemente "ecológico". No soy capaz de aclarerme, y mientras tanto, la publicidad institucional me machaca con el cambio climático, con la comida ecológica, con el estilo de vida sano.
Con todo, reconozco que el rollo ecologista institucional me marea. Y me cansa. Estoy harto de que los gobiernos nos pidan sacrificios a los ciudadanos para reducir las emisiones, para reciclar con eficiencia, para ahorrar energía ... y que luego se gasten el dinero en gilipolleces. Por ejemplo me indigna que me digan que los paneles solares son deficitarios. ¿Y acaso no provoca déficit el coste de cada "inauguración-autobombo"? ¿y el coste de los monumentos de gusto dudoso? ¿y el de los programas cutres de las cadenas públicas? ¿y el de remediar las cagadas de banqueros sin escrúpulos largamente aplaudidos por los mismos que hoy nos hacen pagar sus desmanes?
Cualquier autónomo sabe que no hay beneficio sin inversión, pero en este país vivimos pendientes del "cortoplacismo" de pequeñas victorias sin mucho esfuerzo. Los gobernantes no se plantean que en un plan de inversión a cincuenta años las energías renovables pueden suponer una fuente de ahorro de costes. Tampoco que potenciar la ingeniería ecológica, la ciencia medio-ambiental y la investigación en cultivos o ganadería sostenible es una apuesta para el futuro. Mientras tanto, nos exigen diligencia para llegar a objetivos loables, pero nimios.
¡Qué país, qué fatiga!
no sé vosotros pero a mí el correo me satura. Y no me refiero al correo electrónico, sino a las cartas de toda la vida. Diariamente me llegan 4 ó 5 sobres de bancos, de tiendas, de tarjetas de no sé qué o no sé cuál, de papeluchos varios que se van acumulando hasta que los abro en un rato perdido del fin de semana. Además, no sé qué tiene el papel, pero igual que cuando me llega una información del correo electrónico la despacho enseguida, me cuesta mucho tirar un papel a la basura si no lo he leído y releído.
Por suerte mi conciencia ecologista me ayuda en esta tarea y ya he pedido a los suministradores que me manden las facturas por Internet. Primero fue el proveedor de aDSL. Con la compañía del gas y de la luz tampoco ha habido problema, pero con los bancos no hay nada que hacer. Lo que les cuesta evolucionar, oye.
¡Si incluso los bancos on-line me mandan papelotes a casa!.
ya han caído las primeras nieves sobre el Pico del Lobo y mientras la Sierra de Ayllón se viste de blanco por primera vez en el año, los collalbos dan un paseo por el Hayedo de Montejo. Aquí la alfombra es de hojas de haya y roble, y el tejado un entramado de ramas a veinte metros de altura.
Una ruta aprendiendo botánica y geología con nuestro guía Víctor. Este chaval es un crack de la comunicación. Si todos los profesores fueran como él, y todos los alumnos como los del grupo de hoy, España sería el país más formado del mundo. Un placer aprender así.
Después del paseo, una comida pantagruélica en el Mesón El Hayedo. Hacía un par de años que no pasaba por aquí pero esos chuletones no se olvidan nunca (¿verdad Craig?). Y para bajar la comida, nada mejor que un paseíto por el vecino Horcajuelo de la Sierra. Este pueblo ha quedado precioso con las últimas obras. Un ejemplo de cómo gastarse una subvención estatal.
Se me ha hecho corto. Snif. Siempre sucede cuando disfrutas.
Lo que se observa a simple vista, es que donde antes había cultivos y ganado, hoy la Naturaleza trabaja para devolver al campo su aspecto primigenio. En nuestra montaña segoviana fresnos, robles, chopos y encinas recuperan terreno. Y el crecimiento de la sabina en la zona de Prádena-Casla-Sigueruelo es realmente espectacular.
Respecto a las repoblaciones, la mayor parte de las veces se hacen con poca cabeza. He visto cómo se replantan algunas riberas de los ríos madrileños con cierto sentido y planificación, pero la repoblaciones de la montaña siguen haciéndose con poco orden y sospecho que sin contar con estudios de viabilidad ecológica. Pinares y eucaliptos siguen siendo los favoritos, aprovechando su valor económico, y son menores las repoblaciones de hayedos o castañares. En la foto se puede ver un aislado acebo junto al tradicional modo de repoblación de pinos "en terraza"
También la repoblación sin control trae daños colaterales. El otro día un paisano del pueblo dijo que la causa de la actual escasez de arroyos y fuentes podría ser la repoblación del pinar que se llevó a cabo hace 30-40 años. Al convertir la ladera en una sucesión de terrazas se destruyeron los torrentes y las "mini-cuencas" que alimentaban cada fuente. La reflexión tiene sentido.
estoy sorprendido con la campaña ésta de las bolsas que ha contagiado los supermercados a un ritmo mayor a cualquier gripe A conocida.
Suelo estar a favor de la campañas de concienciación ecológica: planta árboles, ahorra agua, conduce eficientemente, recicla ..., pero esto de las bolsas me ha superado. He oído que el objetivo principal es que no lleguen al mar puesto que sirven de trampa para peces y otros seres marinos. No me imagino cómo una bolsa madrileña puede llegar al mar, pero bueno, incluso concediendo que las barcelonesas tienen más posibilidades de cazar una tortuga por el morro creo que equivocamos el tiro.
Probablemente las bolsas de supermercado son los objetos más reciclados del mundo. Al menos en mi entorno, la gente las usa como bolsas de basura. Y si esas bolsas dejan de llegar a casa, no me acabo de imaginar una cola de vecinos bajando al contenedor con la basurilla en el cuenco de las manos. Digo yo que tendremos que comprar bolsas de esas negras o azules para meter la basura. En conclusión, gastaremos pasta y seguiremos llenando el mundo de bolsas.
Mientras escribo esto, veo en la tele un anuncio (pagado por el Gobierno) animando a dejar de usar las bolsas e incluso leo que la Junta de Castilla y León se plantea otra campaña por su cuenta .
Alucino, sobre todo cuando no dicen nada de otro tipo de envases ridículamente grandes. Al loro a este de la "pildora del día después".
Desde hace unos años, cada vez que viene una sequía prolongada, o una inusual tormenta, o un ciclón golpea el Caribe fuera de temporada, culpamos al “cambio climático causado por el calentamiento global”. Toma teoría. Y como todos somos unos "enteraos", entre caña y caña defiendemos o cuestionamos que la temperatura de la tierra se esté elevando debido a los cambios producidos por la quema de combustibles fósiles, deforestación, etc …
Por desgracia, esto no parece una nueva moda "verde" que dure un par de temporadas, y el problema es de tanta magnitud que ya en 1997 los gobiernos de los países más industrializados se reunieron en Kyoto para debatir la forma de reducir las emisiones de seis gases entre los cuales se encuentran el dióxido de carbono y el metano. La mayoría de las naciones han firmado y ratificado el acuerdo y sus respectivos compromisos de control de emisiones, sin embargo, la realidad es que casi ninguno de los firmantes está cumpliendo su compromiso de forma óptima. La economía, o mejor dicho el consumo, manda.
los países en verde son los que han firmado y ratificado el Protocolo. Datos 2005 (Wikipedia)
A pesar de la postura oficial de los estados, entre los científicos también hay disensiones y como muestra de que todo es opinable, ahí van dos artículos periodísticos (en inglés), referidos al mismo libro ( “Los glaciares de Alaska” de Bruce Molnia ) pero enfocados de una forma totalmente distinta: el primero, en Daily Tech, defendiendo que los glaciares siguen creciendo y el segundo en Science Daily, defendiendo que por el contrario están retrocediendo. El primero de ellos se titula “Los glaciares de Alaska crecen por primera vez en 250 años” y el otro “La mayoría de los glaciares de Alaska se retiran, pierden grosor o se estancan”.
Además adjunto una serie de fotos contenidas en el segundo de los artículos (Es el Glaciar Muir en agosto de 1941, agosto de 1950 y agosto de 2004 )
No soy científico ni me he leído el libro de marras, pero juraría que aquí no queda hielo ni para un gin-tonic ...
Según el libro, en los desiertos del árido planeta Arrakis viven tribus dispersas de humanos que han aprendido a cohabitar perfectamente con su entorno, sin destruirlo, sin dejar irremediables huellas de su paso. En el lado contrario, las "multinacionales" del futuro usan Arrakis como una gigantesca mina sin importarles las consecuencias en el entorno. Herbert presenta Arrakis como un lugar donde humanos, animales y minerales forman un gran organismo "vivo", y donde cualquier cambio en el entorno afecta a todos por igual.
Cuando leí por primera vez Dune, me sorprendió el subtítulo del libro: "una epopeya ecológica". Para un lector adolescente, sólo las batallas o los grandes descubrimientos merecían ser calificadas como "epopeyas", así que abrí el libro con cierta desconfianza. En los Noventa el rollo ecologista ya estaba de moda, pero referido a las ballenas, la Amazonia y tópicos del estilo. Todavía no existía una conciencia global sobre la incidencia del progreso en el entorno.
Este fin de semana me acordé de Dune. Vi una película española titulada "Cenizas del Cielo", que me encantó. Es, por qué no, una mini-epopeya ecológica. No encontraréis planetas que salvar, pero sí una aldea, una cultura, un monte, un ternero, un cerezo, un río, un anciano, ... todos ellos en peligro de muerte por causa de un progreso mal entendido y peor gestionado. Quizá al verla pensé en mi pueblo y ello me hizo más vulnerable a la historia, pero creo que a cualquiera, incluso a alguien que jamás ha pisado el campo, le hubiera calado hondo el mensaje.
Id a verla y contadme.
hoy he vuelto al atasco, esta vez en el taxi que me llevaba a la estación de Atocha para coger el AVE. Como pasajero he observado los cabreos (muchos y variados) de los conductores, sus intentos de coger el carril bueno, o el afán por colarse al prójimo con el magro objetivo de ganar uno o dos puestos en la cola ( sí, ya sé que dos puestos contra un abollón y un cabreo de un día no parece un gran botín, pero me gustaría veros a vosotros )
Hablaba en el post anterior de lo bien que me siento cuando llueve. Soy castellano y tengo la suerte de ver lluvia de vez en cuando, como casi todos los mi región y de aquí hacia el Norte, pero ¿y los del Sur?
En la España “seca” el asunto del agua es casi un tabú. Mirar al cielo durante meses esperando una nube que esta vez no pase de largo desespera a cualquiera, y en el caso de levantinos y muchos andaluces, son ya muchos siglos haciéndolo. ¿Cómo esperar que no se enfaden cuando ven cómo ríos rebosantes de agua limpia y fresca entregan toda esa riqueza al mar?.
Durante siglos, no hubo debate. Una España agrícola y sin ecologistas entendía, sin fisuras, que el día que los medios técnicos permitieran mandar agua desde el norte al sur, se haría sin dudar y para felicidad de todos. Sin embargo, hoy, en el siglo XXI, la ingeniería nos permite llevar agua de una cuenca a otra, pero ahora lo impiden la avaricia, la desconfianza y la conciencia ecologica.
¿Parece que estoy a favor de los transvase? Pues sí, lo parece. Pero no vayamos tan deprisa y veamos los contras.
En el año 2008 el agua no sobra en el Norte, o al menos no en el “Norte transvasable” (Ebro). La sequía afecta a todo el país y el Ebro lleva menos agua año a año, por lo que las regiones de la cuenca de ese río temen perder la lucha del aguapor si lo que ceden hoy lo puedan necesitar mañana. El Sur necesita agua, sí, pero ¿cuánta? Y es que el desarrollo demográfico e industrial del Levante español parece no tener freno.
Así que los detractores del transvase nos presentan a todos los levantinos, sin excepción, como especuladores inmobiliarios, poseedores de grandes urbanizaciones con campos de golf y destructores de costas. Ahora están preocupados por el hábitat del otrora olvidado Delta del Ebro y claman por caudales ecológicos que sustenten flora y fauna de ribera.
Por otro lado no puede ser que los levantinos se presenten como víctimas cuando consumen más agua que nunca. Si tuvieran escasez, denles lo que precisen, pero lo que no es sostenible es que cada año su consumo se eleve.
Mi propuesta es sencilla sobre el papel, no sé si lo es técnicamente: hágase el trasvase y construyanse varios embalses a lo largo del mismo. En Invierno, cuando el Ebro vaya crecido, llenará esos embalses. Y luego, en verano, los aragoneses y catalanes beberán del Ebro, y el resto, de los embalses. ¿Es tan complejo?
Esta semana he comprado una impresora, de éstas que pueden imprimir fotografías y además escanear. Nunca había sentido la necesidad de tener impresora en casa y mucho menos escáner, pero …, me ha dado por ahí.
Aprovechando la reflexión sobre la adquisición del citado aparato, me ha dado por echar la cuenta del número de dispositivos más o menos electrónicos que poseo. Me salen 27. Si me lo hubieran dicho hace unos minutos me hubiera parecido una barbaridad, pero tras listarlos los números cantan. El mero hecho de contarlos hubiera sido un trabajo poco productivo así que vamos a ver si saco alguna conclusión:
- Sí, son muchos, sobre todo teniendo en cuenta que en esta casa sólo vivimos dos personas, que no tenemos lavaplatos, y que usamos una cafetera de las de toda la vida y un exprimidor manual.
- Trece de ellos están continuamente conectados a la red. Y yo que me creía ecoalgo.
- Quince de los ventisiete son usados diariamente. Anda que, si va a ser que soy cacharroadicto.
- Esta tribu de aprendices de robot pueblan principalmente la cocina y el salón-comedor, mientras que no hay ninguno en mi dormitorio. Bien, bien un reducto a salvo de esos bichos.
- Por culpa del recuento, un par de ellos se han ganado el matarile. ¡Si es que no he usado el vídeo ni el DVD en todo el año!. Al trastero con ellos.
Y es que, es verdad que las casas siempre estuvieron llenas de trastos (qué obsesión con no tirar nada, oye), pero lo curioso es que ahora son cacharros electrónicos, muchos de ellos obsoletos, pasados de moda, o simplemente producto de algún afán comprador que nos sorprendió con la guardia baja. Y claro, luego nos quejamos de que la casa parece pequeña, y de que la factura de la luz es alta, no te fastidia, ¡con tanto habitante de silicio dentro!. Pero, qué se le va a hacer. Estamos enganchados, o mejor dicho, conectados, ¡ya no podemos vivir sin ellos!.
no hay nada más poderoso que “la costumbre”. Hace años todos tirábamos vidrio, papel o plásticos a la misma "bolsa" sin advertirlo siquiera. Hoy, llegamos a casa de mamá o de la abuela (la que era nuestra entonces) y nos sorprende que no tengan 4 "bolsas" distintas para cada tipo de residuo. Envases, vidrio, papel, orgánico, … que hoy separo y bajo concienzudamente a los contenedores gracias a que el Ayuntamiento me los ha puesto cerquita, tanto en Alcobendas como en Collado Hermoso. Bien por ellos.
No obstante, la mejor manera de reciclar es no llevarnos a casa tanto envoltorio inútil. Conste que no soy un talibán del asunto y que me gusta que mis regalos tengan una apariencia estupenda, pero … siempre se puede hacer algo. Un par de ejemplos:
- Contra el buzón lleno: muchas de las cartitas diarias son notificaciones de los bancos y facturas en papel. Podemos evitarlas. En la era de Internet casi todos tus proveedores tienen facturas "on line". Bueno para ellos porque se ahorran en correo y bueno para el medio ambiente, con menos papel gastado y sucio que luego hay que reciclar.
- Contra el imperio de las bolsas: No necesitas la bolsita ridícula que te dan en la farmacia para los medicamentos. No necesitas que la dependienta de las "chuches" te meta una bolsa de patatas en otra bolsa más. Yo compro la prensa en Opencor y le digo todos los días a la misma chavala, “no necesito bolsa, gracias”. Ya casi he conseguido que no me “ponga caras”.
Joder, que no es tan difícil. La costumbre es lo que nos hace errar o acertar. Acostumbrémonos pues. Sólo cuesta trabajo los primeros días.