Tener los abdominales marcados es directamente proporcional a tu manera de comer
Mucha gente cree que los hábitos alimenticios no tienen ninguna conexión con el ejercicio que se hace y con la definición corporal (léase “y de los abdominales también”) que uno tiene. Lo cierto es que ambos están tremendamente relacionados, tanto que no existen cambios corporales si no están los dos presentes. Si tienes mucha grasa abdominal entonces es correcto decir que las grandes responsables de esa situación son tu manera de comer y tu poco/ningún nivel de actividad.
Dicho de otro modo, tendrás tanta definición corporal o no de acuerdo a qué tan bien comas y qué tanto te ejercites.
Si lo que quieres es conseguir un abdomen plano entonces analizar y controlar lo que comes y la calidad de lo que comes es el primer paso. Lo primero es desistir de conductas alimenticias que además de añadirle kilos y menos definicion a tu panza sean perjudiciales para tu salud. ¿Sabias que la relación cadera cintura, y el hecho de tener un abdomen plano va más allá de lo estético, y que es en realidad un indicador de salud?
Demasiada grasa abdominal es un problema común en personas que tienen el hábito de hacer comidas grandes y pesadas, y que sumado a eso no tienen un plan de ejercicios regular.
Para tener un abdomen plano, y eventualmente marcar los abdominales, primero tienes que entender el mecanismo de tu cuerpo, cómo y por qué tu cuerpo acumula grasa en la zona abdominal. Algunas personas tienen el hábito de comer hasta no poder moverse y definitivamente eso es comer y acumular más energía de la que el cuerpo naturalmente puede gastar. Así, invariablemente toda esa energía extra se convertirá en grasa y se acumulará en distintas areas del cuerpo siendo el area abdominal el primer lugar y el preferido, el primero en acumular grasa y lamentablemente para todos nosotros, el ultimo lugar del que se elimina.
Las buenas noticias es que esto no es definitivo y que puede revertirse; y que con esfuerzo y determinación tranquilamente podemos encaminarnos hacia un abdomen plano.
Cambios pequeños pueden hacer maravillas. Por ejemplo si quieres reducir el estomago, como regla general evita siempre comer de más. Trata de comer poco y hazlo a lo largo del día, cada dos o tres horas. De la misma manera, trata de comer alimentos nutritivos, que te den energía y reduce los alimentos grasos y los refinados sin valor nutricional alguno. Comidas como la manteca, la mayonesa, la margarina y los productos de pastelería pueden agregar capas de grasa a tu abdomen.
Creo que hemos llegado al punto en que está claro que los abdominales se hacen en la cocina ¿verdad? Nuestro consejo final es que si quieres tener al menos un abdomen plano religiosamente monitorees lo que comes e incorpores el control como algo de todas las semanas. Y por supuesto no te olvides de entrenar porque esa es la otra parte de la ecuación.
Es la manera más fácil de conseguir achatar la panza.
Adelgazar: Tratamiento general de la obesidad
En teoría, el control del peso es una cuestión sencilla. La energía ingerida en forma de comida debe ser igual al total de energía gastada, que es la suma del RMR (ritmo metabólico en reposo o metabolismo basal), el efecto térmico de la comida (o termogénesis dietética) y el efecto térmico de la actividad.
Ecuación del equilibrio de la energía
Ingestión de energía en forma de comida = Total de energía consumida
(RMR + efecto térmico de la comida + efecto térmico de la actividad)
Normalmente, el cuerpo mantiene un equilibrio entre ingestión y consumo calórico, pero cuando este equilibrio es alterado, se perderá o ganará peso, y precisamente, para “quemar” grasas, se debe gastar más energía (calorías) de la que se consume, es decir, que se debe lograr un balance energético negativo.
Balance energético negativo
Consumo de energía (alimentos y bebidas) < Gasto de energía
(metabolismo basal + termogénesis dietética + actividad física)
En cuanto a la mejor manera de perder grasa corporal, la fórmula es universal: una combinación de alimentación adecuada y ejercicio regular es lo más adecuado.
Por medio de esta combinación conseguiremos que la masa grasa y el porcentaje de grasa corporal disminuya, a la vez que la masa magra (tejidos corporales no grasos: tejido óseo, muscular, órganos y tejido conectivo) se mantenga o aumente.
Según J.Madrid (1998), “el ejercicio físico, aparte de gastar calorías, produce un desarrollo de células musculares que son grandes consumidoras de energía incluso en reposo. Esto hace que el metabolismo basal de las personas que aumentan su masa muscular aumente y, por tanto, el gasto energético diario sea mayor”.
Otra forma de incrementar el gasto energético diario consiste en comer más a menudo, distribuyendo los tentempiés y las comidas a intervalos regulares (p.ej., 5 veces al día, cada 3-4
horas aprox.), lo cual no significa comer más, sino equilibrar la cantidad de lo que se come normalmente, un mayor número de veces al día.
La razón de este mayor gasto energético diario es muy simple: al comer más veces al día hay un incremento de la termogénesis dietética (gasto calórico por procesos de digestión, absorción, etc.), y en consecuencia, del gasto energético diario total.
También debemos tener muy presente que la pérdida de peso debe ser un proceso lento, y no superior a 1 kg por semana. Generalmente, para pasar de la normalidad a la obesidad se requiere bastante tiempo, meses e incluso años. Por lo tanto, lo que no podemos pretender es invertir dicho proceso en un tiempo récord. Al igual que cuando se gana peso, la pérdida de éste debe verse como un objetivo a largo plazo, lento y gradual.
Además, las pérdidas “radicales” de peso suelen ser consecuencia de pérdidas considerables de agua, que provocan que el peso se recupere rápidamente.
Por ello, si lo que buscamos son resultados inmediatos, y además por la vía fácil, nuestra empresa se irá a “pique”, ¡con toda seguridad!
Conclusión: la mejor manera de perder peso y mantener una buena forma física parece depender en gran medida de dos factores:
¡¡ALIMENTACIÓN ADECUADA + ACTIVIDAD FÍSICA REGULAR!!
Las dietas o regímenes especiales
Tengamos una cosa clara:
¡¡Las dietas o regímenes especiales no funcionan!!
Muchas dietas se han hecho populares a lo largo de los años, tales como la Dieta del Dr. Atkins, la Dieta de Montignac, la Dieta de la Clínica Mayo, etc. Cada una de ellas afirma ser la más efectiva en lo que a pérdida de peso y mínimo de sacrificio se refiere, pero lo cierto es que no suelen cumplir con las exigencias de una alimentación variada y equilibrada.
Sinceramente, cuando observo algunas de estas dietas ideadas por “especialistas” no me queda más remedio que echarme a reír, aunque también me da cierta pena de aquellas personas que se deciden a pasar por ese “mal trago”. Dicen algunas de estas dietas: “¡Pierda de 2 a 5 kg en una semana!”, y es cierto que se puede lograr este objetivo; sin embargo, lo que no te dicen es lo rápido que vas a recuperar ese peso perdido y el daño que has causado a tu organismo.
En este sentido, una dieta hipocalórica (ingiriendo menos calorías de las que gastamos), variada y equilibrada, debería ser considerada como la única opción válida para perder peso, aunque si ésta no es complementada con ejercicio físico, desecharemos los beneficios que éste comporta.
Ciertamente lograremos reducir peso de una forma correcta, sin embargo, nuestras carnes quedarán fláccidas en vez de fuertes y musculadas, y nuestra resistencia no será precisamente “resistente”.
Los regímenes de moda no sólo provocan un descenso del nivel metabólico, al privar al cuerpo de comida, sino que al ser el consumo de carbohidratos demasiado bajo, el organismo se abastece de sus reservas, no sólo de grasas, sino también de proteínas. ¿Qué va a ocurrir entonces? Algo perjudicial. Si las proteínas se “rompen” para convertirse en fuente de energía, en lugar de realizar sus funciones primordiales (formación de anticuerpos, construcción muscular, etc.), se va a producir una pérdida de masa muscular y una mayor predisposición a enfermedades como consecuencia de esta destrucción innecesaria de proteínas.
Pérdida rápida de peso = Recuperación rápida de peso
Debemos tener muy presente que lo que se pierde a través de los populares regímenes o dietas especiales se compone mayoritariamente de agua y músculo, mientras que la pérdida de grasacorporal es escasa.
Ejercicio recomendado a personas obesas
Las actividades de considerable impacto como, por ejemplo, correr, determinadas actividades deportivas, el aeróbic, etc., pueden acarrear una considerable tensión a músculos y articulaciones si el grado de obesidad es excesivo.
Por este motivo, las personas demasiado obesas deben comenzar su programa de acondicionamiento físico con actividades de bajo impacto, tales como andar a buen ritmo, bicicleta estática, natación, gimnasia acuática, etc., y una vez se comienza a perder ese exceso de grasa y a adquirir una buena forma física, entonces se podrá pasar a actividades más exigentes y de más alto impacto.
Ejercicio y apetito
Muchas personas piensan que con el ejercicio físico les va a entrar tal apetito, que al final van a acabar consumiendo las mismas calorías o más de las que gastan.
Sin embargo, diversos estudios han demostrado que el ejercicio moderado contribuye a disminuir el apetito durante varias horas después de la realización del ejercicio.
Esto es debido a que la sangre, en vez de dirigirse al estómago, se dirige a los músculos que han estado trabajando.
Ecuación del equilibrio de la energía
Ingestión de energía en forma de comida = Total de energía consumida
(RMR + efecto térmico de la comida + efecto térmico de la actividad)
Normalmente, el cuerpo mantiene un equilibrio entre ingestión y consumo calórico, pero cuando este equilibrio es alterado, se perderá o ganará peso, y precisamente, para “quemar” grasas, se debe gastar más energía (calorías) de la que se consume, es decir, que se debe lograr un balance energético negativo.
Balance energético negativo
Consumo de energía (alimentos y bebidas) < Gasto de energía
(metabolismo basal + termogénesis dietética + actividad física)
En cuanto a la mejor manera de perder grasa corporal, la fórmula es universal: una combinación de alimentación adecuada y ejercicio regular es lo más adecuado.
Por medio de esta combinación conseguiremos que la masa grasa y el porcentaje de grasa corporal disminuya, a la vez que la masa magra (tejidos corporales no grasos: tejido óseo, muscular, órganos y tejido conectivo) se mantenga o aumente.
Según J.Madrid (1998), “el ejercicio físico, aparte de gastar calorías, produce un desarrollo de células musculares que son grandes consumidoras de energía incluso en reposo. Esto hace que el metabolismo basal de las personas que aumentan su masa muscular aumente y, por tanto, el gasto energético diario sea mayor”.
Otra forma de incrementar el gasto energético diario consiste en comer más a menudo, distribuyendo los tentempiés y las comidas a intervalos regulares (p.ej., 5 veces al día, cada 3-4
horas aprox.), lo cual no significa comer más, sino equilibrar la cantidad de lo que se come normalmente, un mayor número de veces al día.
La razón de este mayor gasto energético diario es muy simple: al comer más veces al día hay un incremento de la termogénesis dietética (gasto calórico por procesos de digestión, absorción, etc.), y en consecuencia, del gasto energético diario total.
También debemos tener muy presente que la pérdida de peso debe ser un proceso lento, y no superior a 1 kg por semana. Generalmente, para pasar de la normalidad a la obesidad se requiere bastante tiempo, meses e incluso años. Por lo tanto, lo que no podemos pretender es invertir dicho proceso en un tiempo récord. Al igual que cuando se gana peso, la pérdida de éste debe verse como un objetivo a largo plazo, lento y gradual.
Además, las pérdidas “radicales” de peso suelen ser consecuencia de pérdidas considerables de agua, que provocan que el peso se recupere rápidamente.
Por ello, si lo que buscamos son resultados inmediatos, y además por la vía fácil, nuestra empresa se irá a “pique”, ¡con toda seguridad!
Conclusión: la mejor manera de perder peso y mantener una buena forma física parece depender en gran medida de dos factores:
¡¡ALIMENTACIÓN ADECUADA + ACTIVIDAD FÍSICA REGULAR!!
Las dietas o regímenes especiales
Tengamos una cosa clara:
¡¡Las dietas o regímenes especiales no funcionan!!
Muchas dietas se han hecho populares a lo largo de los años, tales como la Dieta del Dr. Atkins, la Dieta de Montignac, la Dieta de la Clínica Mayo, etc. Cada una de ellas afirma ser la más efectiva en lo que a pérdida de peso y mínimo de sacrificio se refiere, pero lo cierto es que no suelen cumplir con las exigencias de una alimentación variada y equilibrada.
Sinceramente, cuando observo algunas de estas dietas ideadas por “especialistas” no me queda más remedio que echarme a reír, aunque también me da cierta pena de aquellas personas que se deciden a pasar por ese “mal trago”. Dicen algunas de estas dietas: “¡Pierda de 2 a 5 kg en una semana!”, y es cierto que se puede lograr este objetivo; sin embargo, lo que no te dicen es lo rápido que vas a recuperar ese peso perdido y el daño que has causado a tu organismo.
En este sentido, una dieta hipocalórica (ingiriendo menos calorías de las que gastamos), variada y equilibrada, debería ser considerada como la única opción válida para perder peso, aunque si ésta no es complementada con ejercicio físico, desecharemos los beneficios que éste comporta.
Ciertamente lograremos reducir peso de una forma correcta, sin embargo, nuestras carnes quedarán fláccidas en vez de fuertes y musculadas, y nuestra resistencia no será precisamente “resistente”.
Los regímenes de moda no sólo provocan un descenso del nivel metabólico, al privar al cuerpo de comida, sino que al ser el consumo de carbohidratos demasiado bajo, el organismo se abastece de sus reservas, no sólo de grasas, sino también de proteínas. ¿Qué va a ocurrir entonces? Algo perjudicial. Si las proteínas se “rompen” para convertirse en fuente de energía, en lugar de realizar sus funciones primordiales (formación de anticuerpos, construcción muscular, etc.), se va a producir una pérdida de masa muscular y una mayor predisposición a enfermedades como consecuencia de esta destrucción innecesaria de proteínas.
Pérdida rápida de peso = Recuperación rápida de peso
Debemos tener muy presente que lo que se pierde a través de los populares regímenes o dietas especiales se compone mayoritariamente de agua y músculo, mientras que la pérdida de grasacorporal es escasa.
Ejercicio recomendado a personas obesas
Las actividades de considerable impacto como, por ejemplo, correr, determinadas actividades deportivas, el aeróbic, etc., pueden acarrear una considerable tensión a músculos y articulaciones si el grado de obesidad es excesivo.
Por este motivo, las personas demasiado obesas deben comenzar su programa de acondicionamiento físico con actividades de bajo impacto, tales como andar a buen ritmo, bicicleta estática, natación, gimnasia acuática, etc., y una vez se comienza a perder ese exceso de grasa y a adquirir una buena forma física, entonces se podrá pasar a actividades más exigentes y de más alto impacto.
Ejercicio y apetito
Muchas personas piensan que con el ejercicio físico les va a entrar tal apetito, que al final van a acabar consumiendo las mismas calorías o más de las que gastan.
Sin embargo, diversos estudios han demostrado que el ejercicio moderado contribuye a disminuir el apetito durante varias horas después de la realización del ejercicio.
Esto es debido a que la sangre, en vez de dirigirse al estómago, se dirige a los músculos que han estado trabajando.
La dieta del ayuno intermitente
Existen varios tipos de dietas que se denominan de IF (intermittent fasting / ayuno intermitente) que se basan en periodos de ayuno o ingesta alimenticia reducida; los que defienden esta teoría citan que mejora la sensibilidad a la insulina, que se aproveha los niveles elevados de la hormona de crecimiento durante el periodo del ayuno, que se suprime el apetito, o que las comidas más grandes nos dejan más satisfechos.
Esta dieta en se basa en 16 horas de ayuno ( solo se puede ingerir café, edulcorantes sin calorías, refrigerantes sin calorías, pastillas sin azúcar ) y 8 horas de alimentación diaria que está centrada dentro del tiempo donde se entrena; puede ser usada para pérdida de grasa, para ganancias de masa magra o para recomposición corporal ( en este caso el porcentaje de grasa debe ser relativamente bajo de 10% a 12% porque esto significa una mejor sensibilidad a la insulina ).
Puntos clave de la dieta
- Es irrelevante el número de comidas hechas en la fase de alimentación (la mayoría opta por 3).
- La mayor parte de las calorías debe ser ingerida tras el entrenamiento; 95%-99% si el entrenamiento es hecho en ayuno, 80% si se consumió una comida antes del entrenamiento, 60% si se consumieron 2 comidas antes del entrenamiento.
- El periodo de alimentación se debe mantenerse constante (siempre de las 13 hs a las 21 hs por ejemplo).
- En los días de descanso, la primera comida debe ser la mayor del día (35%-40% del total diario) muy rica en proteínas (0,9 gramos por kg de peso corporal).
- Los días de entrenamiento la mayor comida debe ser la comida del post-entrenamiento.
- Las calorías y nutrientes serán ciclados a lo largo de la semana de acuerdo al día ( entreno o descanso ); los carbohidratos serán altos en días de entrenamiento y bajo en días de no entrenamiento, siempre se debe consumir mucha proteína tanto en días de entrenamiento como de descanso (2,2 a 3,3g/kg), mientras la grasa será baja los días de entrenamiento y más baja los días de no entrenamiento.
- Para quien entrena en ayuno es aconsejado el uso de cerca de 10 gramos de BCAA's.
Entreno de mañana en ayuno
7 hs: 5-15 minutos antes del entreno: 10 gramos de BCAAs.
7 hs – 8 hs: Entrenamiento.
9 hs: 10 gramos de BCAAs.
10 hs: 10 gramos de BCAAs.
12 hs – 13 hs: La mayor comida del día y la verdadera comida post-entrenamiento; inicio del periodo de 8 hs de alimentación.
20 hs - 21 hs: Última comida del día.
Entreno en ayuno
11:30 hs - 12 hs o 5-15 minutos antes del entrenamiento: 10 gramos de BCAA's.
12 hs -13 hs: Entrenamiento.
13 hs: Comida de Post-Entrenamiento y la mayor del día.
16 hs: Segunda comida.
21 hs: Última comida
Entreno con una comida previa
12 hs - 13 hs: Comida de Pre-Entrenamiento; 20%-25% del total de calorías diarias.
15 hs – 16 hs: Entrenamiento.
16 hs – 17 hs: Comida de Post-Entrenamiento y la mayor del día.
20 hs – 21 hs: Última comida del día.
Entreno con dos comidas previas
12 hs - 13 hs: Primera comida – 20-25% del total de calorías diarias.
16 hs – 17 hs: Comida de Pre-Entrenamiento – 20-25% del total de calorías diarias
20 hs – 21 hs: Comida de Post-Entrenamiento y la mayor del día.
Días de Entrenamiento vs Días de Descanso
De acuerdo al objetivo pretendido (recomposición corporal, pérdida de peso, ganancia de peso), las variaciones de calorías serán diferentes por días.
- Días de entrenamiento: Los carbohidratos altos deben ser dominantes (patata dulce, avena, arroz, etc), proteína moderada (2,2g/kg corporal de pechuga de pollo, carne vacuna magra, pescado magro, etc), grasas bajas.
- Días de descanso: Carbohidratos bajos (vegetales, frutas, etc), proteína alta (2,2-3,3g/kg corporal de cortes más grasos de carne y pescados como salmón, huevos, etc), grasas moderadas (almendras, aguacate, aceite, etc).
Esta dieta en se basa en 16 horas de ayuno ( solo se puede ingerir café, edulcorantes sin calorías, refrigerantes sin calorías, pastillas sin azúcar ) y 8 horas de alimentación diaria que está centrada dentro del tiempo donde se entrena; puede ser usada para pérdida de grasa, para ganancias de masa magra o para recomposición corporal ( en este caso el porcentaje de grasa debe ser relativamente bajo de 10% a 12% porque esto significa una mejor sensibilidad a la insulina ).
Puntos clave de la dieta
- Es irrelevante el número de comidas hechas en la fase de alimentación (la mayoría opta por 3).
- La mayor parte de las calorías debe ser ingerida tras el entrenamiento; 95%-99% si el entrenamiento es hecho en ayuno, 80% si se consumió una comida antes del entrenamiento, 60% si se consumieron 2 comidas antes del entrenamiento.
- El periodo de alimentación se debe mantenerse constante (siempre de las 13 hs a las 21 hs por ejemplo).
- En los días de descanso, la primera comida debe ser la mayor del día (35%-40% del total diario) muy rica en proteínas (0,9 gramos por kg de peso corporal).
- Los días de entrenamiento la mayor comida debe ser la comida del post-entrenamiento.
- Las calorías y nutrientes serán ciclados a lo largo de la semana de acuerdo al día ( entreno o descanso ); los carbohidratos serán altos en días de entrenamiento y bajo en días de no entrenamiento, siempre se debe consumir mucha proteína tanto en días de entrenamiento como de descanso (2,2 a 3,3g/kg), mientras la grasa será baja los días de entrenamiento y más baja los días de no entrenamiento.
- Para quien entrena en ayuno es aconsejado el uso de cerca de 10 gramos de BCAA's.
Entreno de mañana en ayuno
7 hs: 5-15 minutos antes del entreno: 10 gramos de BCAAs.
7 hs – 8 hs: Entrenamiento.
9 hs: 10 gramos de BCAAs.
10 hs: 10 gramos de BCAAs.
12 hs – 13 hs: La mayor comida del día y la verdadera comida post-entrenamiento; inicio del periodo de 8 hs de alimentación.
20 hs - 21 hs: Última comida del día.
Entreno en ayuno
11:30 hs - 12 hs o 5-15 minutos antes del entrenamiento: 10 gramos de BCAA's.
12 hs -13 hs: Entrenamiento.
13 hs: Comida de Post-Entrenamiento y la mayor del día.
16 hs: Segunda comida.
21 hs: Última comida
Entreno con una comida previa
12 hs - 13 hs: Comida de Pre-Entrenamiento; 20%-25% del total de calorías diarias.
15 hs – 16 hs: Entrenamiento.
16 hs – 17 hs: Comida de Post-Entrenamiento y la mayor del día.
20 hs – 21 hs: Última comida del día.
Entreno con dos comidas previas
12 hs - 13 hs: Primera comida – 20-25% del total de calorías diarias.
16 hs – 17 hs: Comida de Pre-Entrenamiento – 20-25% del total de calorías diarias
20 hs – 21 hs: Comida de Post-Entrenamiento y la mayor del día.
Días de Entrenamiento vs Días de Descanso
De acuerdo al objetivo pretendido (recomposición corporal, pérdida de peso, ganancia de peso), las variaciones de calorías serán diferentes por días.
- Días de entrenamiento: Los carbohidratos altos deben ser dominantes (patata dulce, avena, arroz, etc), proteína moderada (2,2g/kg corporal de pechuga de pollo, carne vacuna magra, pescado magro, etc), grasas bajas.
- Días de descanso: Carbohidratos bajos (vegetales, frutas, etc), proteína alta (2,2-3,3g/kg corporal de cortes más grasos de carne y pescados como salmón, huevos, etc), grasas moderadas (almendras, aguacate, aceite, etc).
Kevin Kline y Dakota Fanning protagonizarán 'The Last of Robin Hood'
Los biopics más atractivos tienden a ser los que se centran en una etapa muy concreta de la persona en cuestión – la reciente ‘Lincoln‘ (Steven Spielberg, 2012) es un buen ejemplo de ello-, y ahora es el momento de hablar de uno que tomará como base los últimos días de vida del mítico Errol Flynn. El motivo de ello es que ya se ha confirmado que Kevin Kline y Dakota Fanning van a ser los grandes protagonistas de ‘The Last of Robin Hood‘ (Richard Glatzer y Wash Westmoreland).
‘The Last of Robin Hood’ se centrará en la singular relación entre Errol Flynn (Kline) y Beverly Aadland (Fanning), ya que el primero falleció con 50 años y ella contaba por aquel entonces con apenas 17. Flynn consiguió enchufar a Aadland en ‘Cuban Rebel Girls‘ (Barry Mahon, 1959), última película protagonizada por el memorable ‘Robin de los bosques‘ (‘The Adventures of Robin Hood’, Michael Curtiz y William Keighley, 1938). Aadland asegura que iban a casarse, pero un ataque al corazón acabó con la vida de Errol Flynn el 24 de octubre de 1959.
Estaba previsto que el rodaje de la película comenzase a principios de este mes, pero las dificultades para contratar a al actriz idónea para el papel de Aadland. Se comenta que Susan Sarandon podría unirse también al reparto dando vida a la madre de Aadland, pero aún no hay confirmación oficial al respecto. Por su parte, Richard Glatzer y Wash Westmoreland, responsables de ‘Quinceañera’(2006) se encargarán tanto del guión como de la puesta en escena de ‘The Last of Robin Hood’. Espero que no sólo potencien la relación amorosa entre los protagonistas, ya que la ideología – defensor de Fidel Castro- por aquel entonces del actor también debería ser reflejada, ¿no creéis?
‘The Last of Robin Hood’ se centrará en la singular relación entre Errol Flynn (Kline) y Beverly Aadland (Fanning), ya que el primero falleció con 50 años y ella contaba por aquel entonces con apenas 17. Flynn consiguió enchufar a Aadland en ‘Cuban Rebel Girls‘ (Barry Mahon, 1959), última película protagonizada por el memorable ‘Robin de los bosques‘ (‘The Adventures of Robin Hood’, Michael Curtiz y William Keighley, 1938). Aadland asegura que iban a casarse, pero un ataque al corazón acabó con la vida de Errol Flynn el 24 de octubre de 1959.
Estaba previsto que el rodaje de la película comenzase a principios de este mes, pero las dificultades para contratar a al actriz idónea para el papel de Aadland. Se comenta que Susan Sarandon podría unirse también al reparto dando vida a la madre de Aadland, pero aún no hay confirmación oficial al respecto. Por su parte, Richard Glatzer y Wash Westmoreland, responsables de ‘Quinceañera’(2006) se encargarán tanto del guión como de la puesta en escena de ‘The Last of Robin Hood’. Espero que no sólo potencien la relación amorosa entre los protagonistas, ya que la ideología – defensor de Fidel Castro- por aquel entonces del actor también debería ser reflejada, ¿no creéis?
JJ Abrams confirmado para dirigir Star Wars Episodio 7
Sorprendente noticia la del fichaje del cineasta JJ Abrams para dirigir 'Star Wars Episodio 7'. A pesar de que el propio Abrams lo desmintiera hace unas semanas, se acaba de confirmar su presencia el el proyecto.
Según informa TheWrap, también se estuvo barajando el nombre de Ben Affleck para la dirección de 'Star Wars Episodio 7'. Aunque finalmente se antepuso el del responsable de la nueva franquicia Star Trek.
El pasado mes de noviembre JJ Abrams desmintió que estuviera en la terna para optar al puesto de director en 'Star Wars Episodio 7'
Por ahora se prevee que 'Star Wars Episodio 7' llegue a los cines en el año 2015. Siendo el inicio de una nueva trilogía, conformando un total de 9 películas para la mítica saga de ciencia ficción Star Wars, creación de George Lucas.
Según informa TheWrap, también se estuvo barajando el nombre de Ben Affleck para la dirección de 'Star Wars Episodio 7'. Aunque finalmente se antepuso el del responsable de la nueva franquicia Star Trek.
El pasado mes de noviembre JJ Abrams desmintió que estuviera en la terna para optar al puesto de director en 'Star Wars Episodio 7'
Por ahora se prevee que 'Star Wars Episodio 7' llegue a los cines en el año 2015. Siendo el inicio de una nueva trilogía, conformando un total de 9 películas para la mítica saga de ciencia ficción Star Wars, creación de George Lucas.